Conocer tu cuerpo sexuado es algo importante para poder sentir, comunicarte y disfrutar plenamente de las relaciones sexuales. Todavía existe mucha confusión debido al tabú del sexo y a una manera de entender la sexualidad como un mecanismo reproductor heredada de siglos pasados.
Muchas personas siguen equiparando, por ejemplo, el pene en el hombre con la vagina en la mujer cuando esto no es así, ni anatómica ni biológicamente. Hablamos de ello y lo explicamos detenidamente en el podcast de hoy, junto con otra mucho información básica que te permitirá conocerte mejor y entender el funcionamiento de tu cuerpo sexuado.
Desde que en 1975 la OMS (Organización Mundial de la Salud) define el concepto de “Salud Sexual” queda marcada una frontera bien clara entre las funciones reproductoras por una parte y las placenteras y de comunicación inherentes a la sexualidad humana por otra. Desde entonces se reconoce que toda persona, desde que nace hasta que muere, tiene una dimensión que es su sexualidad y que toca la salud, la comunicación, el placer y el bienestar en general.
Por lo tanto, podemos decir que somos personas sexuadas de los pies a la cabeza y en un sentido literal. Cuando en las conferencias y cursos pregunto si alguien sabe cuál es la zona erógena primordial en el cuerpo, normalmente me responden que la zona genital. Si sigo preguntando se suelen sumar otras partes como los pechos en la mujer, las nalgas y piernas, la boca y los labios, la nuca, la parte interior de las extremidades, la zona anal, la espalda y los pies.
Si sigo preguntando terminamos por mencionar todas las partes del cuerpo y es entonces cuando nos damos cuenta que la piel es el órgano erógeno por excelencia. De hecho, la piel recubre todo nuestro cuerpo y tiene una capacidad sensitiva y, por añadidura, erotizable.
Esto explica la variedad y diversidad de zonas erógenas existentes entre diferentes personas. Tu “mapa erógeno” o mapa del placer será único y consecuencia o suma de tus vivencias personales, del descubrimiento del placer en tu propio cuerpo y de lo experimentado en las relaciones sexuales con los demás.
Es verdad que las zonas mucosas (los labios y la boca, los genitales y la zona anal) tienen una mayor concentración de terminaciones sensitivas y las hacen especialmente erógenas, es decir, placenteras. Pero también es verdad que el resto de la piel posee esa misma cualidad. Es muy importante señalar que no existe una manera “normal” de gozar o de sentir y que no todos somos iguales.
Si hablamos de la respuesta sexual humana, sabemos que la excitación se va acumulando al estimular el cuerpo hasta el punto de orgasmo. El orgasmo es una habilidad que se aprende por experimentación y estimulación corporal. Todos los hombres saben que existe una zona de su cuerpo, el pene, que es central en la consecución del orgasmo.
Resulta que su equivalente en la mujer es la vulva, que es externa y que incluye el clítoris y los labios menores. Es de lógica suponer que para que una mujer alcance el orgasmo será más sencillo por estimulación externa que por penetración vaginal. La Biología lo señala. Y así lo han descubierto millones de mujeres que, al masturbarse, se estimulan de esta forma.
La vagina es un órgano con muy poca sensibilidad en sus dos tercios internos. Por tanto podemos deducir que la penetración vaginal no es la práctica sexual más eficaz para lograr el orgasmo en la mujer. Todo esto quedó bastante claro desde que Masters y Johnson, investigadores de la la Sexualidad Humana, lo confirmaron ya en sus investigaciones del siglo pasado y elaboraron las bases de la Sexología moderna.
Toda esta información, que es fundamental, la explicamos con mayor detalle en el podcast de hoy. Me pareció una muy buena idea hacer un repaso de lo que la Anatomía y Fisiología nos dicen y aportan a la comprensión de nuestro cuerpo sexuado.
Espero haya despertado tu interés y nuevas preguntas que iremos respondiendo en el Blog y Podcast de Sexología al que te invito a suscribirte para no perderte nada.
Un repaso siempre interesante e importante de los órganos que nos ayudan a obtener placer, entre otras muchas cosas y que a veces son los grandes desconocidos de nuestro cuerpo. Carmen ha dado unas explicaciones claras y concisas y muy recomendables para personas que se inician ahora en el sexo o no.
Gracias Bárbara, es verdad que en ocasiones olvidamos que tenemos TODO un cuerpo con el sentir y disfrutar. En este podcast lo recordamos de forma sencilla y amena. Un saludo!
La verdad es que creo que en temas de sexo lo conocemos todos y es que no sabemos casi nada en realidad de zonas erógenas ni sabemos sacarle partido a tantas partes de nuestro cuerpo y del de la otra persona que nos acompaña. Somos muy ignorantes en este terreno y esta información nos viene de maravilla a todos y todas para seguir investigando formas de placer y de satisfacción. Me ha gustado mucho y lo he disfrutado y por supuesto puesto en práctica lo aprendido.
Muy de acuerdo y gracias por tu comentario. En mi opinión falta TIEMPO de calidad, tranquilo, en pareja…para poder tener esa actitud que necesitamos para explorar y degustar. Suelo recomendar hacer una cita, con la agenda, como si fuéramos al dentista, dos horas sin ruidos ni interferencias para poder “parra el mundo” y dedicarnos en pareja a algo tan especial como sentir nuestros cuerpos. Ahí queda la sugerencia para quien le parezca interesante!!